Desde antes de la pandemia el Hogar de México se reconfiguraba, familias más reducidas en viviendas con menos espacio y lo que tradicionalmente se le conocía como la familia muégano, en claro descenso (apenas un 12% de las viviendas del País al 2020).
Durante la pandemia fue necesario comprender que, si 7 de cada 10 hogares en el territorio nacional son lugares con menos de 100 m², requerían de una oferta especializada de servicios, productos, comunicación, asesoría para la construcción del tan anhelado “calor de hogar” que simboliza el estar descansado, trabajando o simplemente conviviendo en la casa. Pero también entender la importancia del “perrijo” o el “gatijo” en dichos espacios, el 85% de los hogares tienen una mascota (Más del 80% son perros) y basta con saber que los “Millenials” gastan su presupuesto en artículos para sus mascotas.
Por ello durante la pandemia se detonaron necesidades y actitudes evidentes en esta realidad de espacio:
- El hogar se tuvo que adaptar en oficina, escuela, lugar de juegos, hospital, gimnasio y hasta centro de meditación para los integrantes de la familia.
- Las tensiones familiares se potencializaron al convivir más tiempo con el resto de los integrantes, por ello se valoró encontrar un rincón personal para la privacidad e inclusive la negociación de turnos para estar en el auto, con la finalidad de reducir lo conflictos entre los integrantes.
- Se ahorró en transporte y consumo fuera del hogar, pero incrementaron los gastos en servicios como luz, gas, agua e internet, así como despensa. Estas actividades permitieron revalorar los presupuestos para una nueva cultura del cero desperdicio, o en algunos casos, qué podemos hacer como familia para no tener gastos innecesarios.
- Aumentaron los dispositivos, lugares y tiempos para llevar a cabo actividades; lo anterior implica un nuevo concepto de negociación en la familia, así como el aprendizaje de nuevas aplicaciones, conceptos tecnológicos y métodos de compra.
- Y el más destacable de los aprendizajes: los códigos familiares fueron altamente violentados, es decir, la convivencia en momentos difíciles para hacer frente a temas de salud, económicos, culturales, trámites oficiales, pendientes familiares o cotidianos obligaron a los integrantes de la familia en ser alumnos y maestros de nuevas situaciones lo que permitió ser un laboratorio de prueba para los hijos, madres, abuelos, amigos, hermanos de los escenarios que se enfrentarán en un futuro, ahora con nuevas herramientas para afrontarlos.
Por lo tanto, esta nueva realidad de los hogares permite ocupar espacios de oportunidad para muchas iniciativas con cada uno de los integrantes del hogar, sin embargo, primero será necesario apropiarse de algunos secretos de conexión con las familias:
- Adaptabilidad: para ser capaz de evolucionar la oferta y encontrar un mensaje común en lo que se necesita holísticamente en la vivienda, lo que se pretende entregar a nivel producto o servicio y tiene la finalidad de persuadir en la compra.
- Afinar soluciones: con el objetivo de implementar acciones personalizadas en estas nuevas necesidades identificadas.
- Segmentar: profundizar en momentos de consumo y compra, lugares, situaciones, actitudes y comunicación aprendida.
- Empatizar: en el actual lenguaje, tono y códigos de comunicación del on / in / off line de actividades relacionadas con los segmentos potenciales.
- Comunicar: para no quedarse callados y participar en las decisiones, complicidad, alegrías, tristezas, preocupaciones y sueños que requieren ser atendidos en el presente y nuevo futuro de las familias.
- Construir: una relación cercana con los integrantes a partir de recompensas, reconocimiento de los esfuerzos y obstáculos que se libraron durante los momentos de apremio.
- Familiarizar y profesionalizar el circulo familiar, que se perfila para ser el principal espacio donde se construye confianza, unión, solidaridad, compañerismo y generador de valores solidos para el País con sus más de 35 millones de viviendas que albergan a más de 126 millones de habitantes.
En secretos de México, apoyamos a las empresas, iniciativas, organizaciones y marcas para decodificar esta realidad con inteligencia aplicada, la cual está sustentada con información sindicada y disponible para todos nuestros clientes.